Seguro que has oído hablar de la espirulina , un alga verde muy rica en clorofila y ficocianina. Considerado un auténtico superalimento, también es utilizado por la NASA como suplemento para los astronautas, precisamente por sus excelentes propiedades nutritivas y curativas.
La espirulina está compuesta por un 75% de proteínas, contiene numerosas vitaminas (A, E, D, grupo B) y minerales (hierro, zinc). Es una excelente fuente de oxígeno, siendo rico en clorofila. Estos son los principales beneficios de la espirulina .
Tiene propiedades antioxidantes, anticancerígenas, antiinflamatorias, antivirales y fortalece el sistema inmunológico. Contribuye a la producción de acetilcolina (un neurotransmisor), y ayuda a mantener un buen funcionamiento del sistema nervioso.
Tiene propiedades antianémicas, atribuidas sobre todo a la clorofila ya que es capaz de realizar una función similar a la de la hemoglobina en la sangre. Es un antiséptico natural y estimula el tránsito intestinal.
La espirulina contiene fenilalanina, un aminoácido que puede reducir el apetito y ayudarnos a perder peso.
También tiene beneficios sobre la salud cardiovascular: ayuda a reducir el colesterol y los triglicéridos, y a regular la presión arterial. Las vitaminas de espirulina también permiten que las células funcionen bien.
La espirulina está disponible en forma de suplemento o en polvo. Se puede añadir a nuestros platos: es un alimento muy versátil.
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