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Las varices son un problema circulatorio que se manifiesta, inicialmente, a través de síntomas como pesadez e hinchazón en las piernas, luego con la aparición de las clásicas imperfecciones provocadas por el cambio de color de las venas, que se oscurecen.
El de las varices no es un problema que deba considerarse únicamente estético, sino que debe ser puesto en conocimiento de un médico. En casos severos pueden acompañarse de endurecimiento o inflamación de las venas, así como de sangrado.
Si el médico establece la no gravedad de las varices, es posible adoptar remedios naturales sencillos que puedan ayudar a paliarlas y que no tengan efectos secundarios.
Dado que se trata de un problema circulatorio, es fundamental cambiar algunos hábitos y llevar un estilo de vida saludable, con una dieta equilibrada y actividad física.
A continuación te proponemos la receta de una crema casera que reduce las varices gracias a las propiedades de sus ingredientes.
La caléndula , ingrediente principal de la crema, es una planta rica en flavonoides y vitamina C, dos nutrientes que ayudan a reactivar la circulación sanguínea y acelerar la renovación celular . Además, tiene propiedades antiinflamatorias y calmantes, capaces de aliviar síntomas como la pesadez y la hinchazón en las piernas .
Ingredientes:
- flores de caléndula secas (disponibles en una herbolaria)
- 50 gramos de cera de abeja
- 750 gramos de aceite de oliva o aceite de almendras
Ponga las flores de caléndula en un frasco de vidrio, llenándolo hasta un tercio. Vierta el aceite hasta llenar el frasco, cubriendo todas las flores.
Cierre el frasco y guárdelo durante 40 días en un lugar oscuro.
Pasado este tiempo, filtrar el aceite y calentarlo al baño maría para poder mezclarlo con la cera de abejas y dejar que se derrita por completo y se mezcle con el aceite.
Vierta la crema para venas varicosas en un frasco y deje que se enfríe. Aplicar en las piernas al menos 3 veces por semana, masajeando de abajo hacia arriba. Guarda la nata en la nevera.
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