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Algunos investigadores han realizado diversos estudios sobre el extracto de hoja de olivo y sus propiedades beneficiosas, con resultados sorprendentes en el campo médico. Los beneficios de las hojas de olivo van desde proteger los sistemas cardiovascular e inmunológico hasta aumentar la energía, apoyar la presión arterial y prevenir la diabetes y el Alzheimer.
Las aceitunas se cultivan en los países mediterráneos y sus hojas se utilizaban en la antigüedad en los procesos de momificación de los faraones. Ya en el Antiguo Egipto se conocían y aplicaban sus propiedades medicinales. Las hojas de olivo también eran un símbolo del poder divino.
En el siglo XIX, las hojas de olivo se usaban para tratar la gripe, más tarde también para tratar la malaria.
El extracto de hoja de olivo posee propiedades antibacterianas que se han utilizado para tratar afecciones como candidiasis, meningitis, encefalitis, influenza, hepatitis B, herpes, malaria, tuberculosis, gonorrea, diarrea, infecciones del tracto urinario y auditivas.
El extracto de hoja de olivo protege al corazón de la oclusión coronaria. Cuando se consume regularmente y durante mucho tiempo, se ha demostrado que el extracto de hoja de olivo previene la arteriosclerosis.
Todos los beneficios de las hojas de olivo han contribuido al interés del mundo científico por la “dieta mediterránea”, que contiene grandes concentraciones de aceite de oliva.
El extracto de hoja de olivo está disponible en forma de aceite o cápsulas, pero es posible usar las hojas directamente para preparar un té de hierbas para endulzar con miel.
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