Las manzanas se encuentran entre las frutas más consumidas y apreciadas del mundo. Hay muchas variedades, pero la verde es una de las más saludables. En este artículo, explicamos por qué comer una manzana verde con el estómago vacío todos los días puede realmente revolucionar nuestra salud para mejor.
Las manzanas son ricas en proteínas, minerales, vitaminas y fibra. La pectina es sin duda la fibra más importante, sobre todo por sus beneficios para la digestión de los alimentos y la prevención del estreñimiento. También ayuda a reducir el colesterol y nos ayuda a sentirnos llenos.
Radicales libres Las manzanas verdes son ricas en flavonoides y vitamina C, potentes antioxidantes naturales que nos protegen del daño de los radicales libres, principal causante del envejecimiento celular y de graves enfermedades como el cáncer.
Diabetes La pectina de manzana verde ayuda a retrasar la absorción de glucosa en el intestino, y es muy útil para quienes padecen diabetes.
Salud bucal La manzana ayuda a eliminar bacterias y a limpiar los dientes, eliminando residuos y previniendo la formación de placa.
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